lunes, 8 de octubre de 2007

AL SUEÑO DEL CUCHI NADIE LO PUEDE ENLAZAR

Cuchi Leguizamón - desde Salta su legado al mundo.
Admiro a este periodista, quien supo retratar
la realidad artistica y humana del cuchi, transcribo su texto.
http://www.raicesargentinas.com.ar/Notas/reportajes/cuchi.htm

Al sueño del "Cuchi" nadie lo puede enlazar
Por Roberto E. Espinosa

Un duende pianotea sueños desgajados de vida.
Un rumor de notas se despeña en el monte.
La voz de un pájaro incendia la tarde y entre las hojas se oye susurrar...
"Ay Anta, mi tierra arisca, sombra de los tigres, flor del yuchán,
cuando muere una corzuela, la arena se vuelve sal.
Volteando sin asco el monte, el ojo del hacha quiere llorar,
al sueño de los cuatreros nadie lo puede enlazar...
"Gustavo "Cuchi" Leguizamón parpadea la zamba y un ventarrón lo lleva a otros árboles,
a otros pájaros que fueron construyendo los recuerdos en su memoria.
Sentado en su sillón, agita el tiempo en un gesto intentado recordar viejos acordes.
La bolsa de los años se le ha subido al hombro.
El Cuchi confiesa con dolorosa ironía que se ha olvidado de tocar el piano yluego de un silencio, agrega que está dispuesto a aprender de nuevo.
Habla de una vidala que dedicó al Che Guevara y que ha sido orquestada.
Poco a poco va alimentando la charla, en ese rincón salteño, su casa,
donde el piano da la bienvenida a los amigos.-
Leyendo las memorias de Billie Holiday se descubre el poder del jazz,
de la música, que ha servido a los negros para alcanzar la libertad en muchos
aspectos ante la sociedad. ¿Cree que nuestra música tiene esa fuerza?- ¡Cómo no!
La música es una fuerza espiritual incontenible.
La Billie Holiday se vio obligada a ejercer la prostitución, a usar drogas para poder
trabajar diez horas. Esta mujer extraordinaria, de voz increíble tuvo que vencer
el precio de su propia sangre. La Billie cantaba como los dioses y al final la tienen
que tratar como un dios. Mi experiencia en París...prometo que lo que te digo
es cierto... He comenzado tocando y la gente me aplaudió de pie; llevaba más
de un minuto. Yo estaba avergonzado por la adhesión espontánea de la gente.
¿Qué puede haber pasado? ¿Qué habrán visto en mi música?-
¿Qué le parece si hablamos de la música popular?- Te voy a contar una historia.
El jazz era promovido por los yanquis y era una penetración real, pero hermosa,
porque era con un valor importante; es una de las músicas más cultas del mundo.
Pero los yanquis se dan cuenta después de que el jazz es negro y no tiene nada
que ver con ellos. El Irving Berlin es un músico discreto para hacer músicas melosas.
Pero el jazz lo hace pedazos porque tiene la fuerza de estos negros subestimados
por el mundo entero. Era una penetración por sus propios derechos.
El Art Tatum es un pianista de primera categoría, el Ellington no tiene qué
envidiarle al señor Toscanini. ¡Qué pasaba con el jazz! Lo promocionaba
a Tata Dios, ahí no había problemas comerciales, sino culturales.
Cuando los yanquis se dan cuenta de que la promoción no la reciben ellos,
cambian y se van a promocionar el rock, al bueno y al malo, vulgarizando la
penetración cultural...- Por lo que veo, no es un rockero entendido...-
Alguien dijo que la música es el arte de combinar los sonidos, otro le agregó los
silencios (se ríe con ganas), y vino un rockero y le aumentó los ruidos.-
Cambiando de andén, algunos sostienen que la Escuela de Viena perjudicó a los
compositores argentinos, alejándolos de una música nacional.- No, no. La cultura no
tiene líneas negativas, no las puede tener. La identidad no te abandona cuando vos la representás. Nada hace mal a la cultura, sobre todo el conocimiento del camino por
donde han andado los genios de la calidad del Alban Berg; la honestidad del Schonberg
es la de un santo. Lo que pasa es que las recetas se destruyen cada vez más.
No hay recetas para hacer música y hay que conocer lo más que se pueda para con la mayor libertad elaborar tu mensaje. No es cuestión de decir: "Ay, no, esto es reaccionario".
"Ay, no le enseñen a los chicos música contemporánea porque se van a echar a perder;
se van a hacer libres, desprejuiciados".Cada artista puede ser un héroe; está obligado
a ser un héroe.- No necesariamente se debe ser un héroe en la vida...- Pero en el arte
se está obligado a serlo. Porque lo más importante es la causa que te puede llevar a
pelear por todos.- Pero Bach no creo que se haya sentido un héroe.-
No quería ser, pero lo era. El héroe no tiene por qué tener conciencia de su sacrificio,
de su lucha... Héroe puede ser Acosta Villafañe que decía:"¡Viva Catamarca,
aunque yo me muera de hambre!"- Usted habla siempre de Erik Satie y se le parece
bastante en el humor, en el desenfado y en el modo de abordar la creación musical.-
Satie es un viejo espléndido. Es el viejo más joven de la música. El ha hecho
también su revolución, ha empezado a reírse del formalismo. Sus ideas las recibieron
todos los grandes músicos de su época que lo querían mucho, especialmente Ravel.
(Da una larga explicación de análisis musical sobre los aportes de Satie).
Cada compositor debe estudiar. Yo tengo ciertofacilismo para las melodías,
las trabajo mucho. Un tema puede salir después de 40 años; siempre guardo los
apuntes musicales. Lo que hay que cuidar es el buen gusto.-
Una última pregunta: ¿la música popular puede evolucionar?- ¿Que no va a evolucionar?
¡Cómo hubiera escrito yo la Chacarera de la Muerte si no hubiera conocido a
Schoenberg! Lo que sucede es que hay una gran confusión en este país.
Todo el mundo cree que el folklore es música documental y que no hay que innovar.
¡Mentira¡ (se enoja) En la música popular todos tienen derecho de cualquier innovación
y se salva el que tiene talento. A ver, yo quiero saber si un compositor de canciones
es importante. Veamos si su canción se puede cantar. La músicab fundamentalmente
es canto.
Nota: Este encuentro con el "Cuchi" Leguizamón ocurrió en
San Miguel deTucumán en 1988. cuando aún se encontraba en su plenitud.
Reportaje publicado por el Diario La Gaceta de Tucumán

Roberto Espinosa
respinosa@lagaceta.com.ar

Homenaje al Cuchi - PATIO DE NARANJOS, zamba de Ruben Ferrero

el Maestro Cuchi Legizamon, con la música en sus manos.

Junto a Marcos Gonzalez Dávalos, un amigazo que supo tener el
programa JERARQUIA EN FOLCLORE en radio nacional y que
abandonó cuando llegó el gritón de Cosquín...parece que no se entendieron.
Marcos le puso la letra, a una música hecha zamba que había compuesto
solamente penzsando en ese maravilloso hombre y artista que fué
el Cuchi, y que supo conquistar mi corazón.